miércoles, 21 de octubre de 2009

SE PONE EL MONO DE TRABAJO Y GANA

Partido para nada bonito y vistozo por el equipo sevillista, no así por el equipo alemán del Stuttgart, un primer tiempo bastante espeso le daba alas a los alemanes que hacían un juego bonito sobre todo en el centro del campo;

pero ya sabemos que esto del fútbol no hay quien lo entienda, jugando mal ganamos y vaya si lo presenciamos, Manolo Jiménez saco la varita y compensó sobremanera el centro del campo sevillista que hacia aguas metiendo a Aldo Duscher junto a Zokora y al canterano Lolo, eso sí en detrimento de Luis Fabiano que tuvo que probar el frío sillón del banquillo , puede ser un correctivo al brasileiro por su escasa aportación en la primera parte.

Ya con uno a cero al finalizar la primera parte en la segunda metimos dos más y con un solo delantero, el fútbol como decíamos es caprichoso.
Lo que es evidente que este Sevilla gana y lo hace casi siempre juegue como juegue y va denotando un aire de equipo grande esa es la sensación , ayer sin jugar al fútbol, sufriendo se gano, a pesar del buen partido del equipo alemán.

Junto al Olimpic de Lyon somos el equipo que lo ha ganado todo hasta ahora, en Europa ya somos un equipo interesante pero eso ya sabemos que quien lo acredita son los títulos.

SIEMPRE NO SE PUEDE GANAR

El equipo coruñés, que no sabe dónde está su techo, logró su cuarta victoria consecutiva de la temporada, otra vez sin encajar goles, y amargó al Sevilla con un intenso repliegue y un golazo en una jugada aislada.

La defensa del conjunto coruñés en campo propio y la falta de dinamismo del Sevilla en ataque, sin Luis Fabiano en el campo, ralentizaron el juego hasta el aburrimiento en los primeros 35 minutos de partido.

Dolido todavía por las cuatro derrotas sufridas ante los andaluces la pasada temporada, Lotina programó a sus jugadores para frenar el avance del Sevilla con una enorme presión en la línea medular, donde los de Manolo Jiménez tenían muchos problemas para encontrar espacios por donde penetrar hasta el marco de Aranzubia.

Un error del argentino a los seis minutos de juego tras un centro de Jesús Navas, dio el primer susto a los blanquiazules, pero el brasileño Renato no supo aprovechar el fallo en el área deportivista y envió el balón fuera.

El Deportivo resistió el empuje de los andaluces, que fue a más con el paso de los minutos, pero todos sus ataques morían en la frontal del área, donde la mejor ocasión fue para Adriano con un disparo con rosca que no llegó a coger portería por muy poco.

Aunque los sevillanos llevaban el peso del partido, los coruñeses empezaron a utilizar las lecciones al contragolpe de Lotina superada la media hora de juego sin llegar a intimidar al sustituto del lesionado Andrés Palop, Javi Varas.

Con el Sevilla atragantado en ataque, el Deportivo aumentó su presencia en campo rival y un error en el despeje de la zaga andaluza dejó el balón en la línea de tres cuartos de ataque a Juan Rodríguez, que soltó un latigazo imposible para Varas.

El conjunto de Jiménez intentó reponerse del golpe de inmediato con la ambición de Jesús Navas, que buscó portería con un lanzamiento escorado a la banda izquierda y después se trastabilló tras un error de Colotto y de Manuel Pablo.

El Deportivo, reforzado por el gol, tuvo más mordiente en los últimos minutos del primer tiempo, pero el mexicano Guardado no dirigió el balón a portería tras un centro de Juan Rodríguez, y Varas sacó con una excepcional intervención un cabezazo a bocajarro de Riki tras una falta ejecutada por el canterano Iván Pérez.

En la reanudación, el Sevilla volvió a la carga y reemprendió la búsqueda del empate con un disparo lejano de Negredo que desvió Dani Aranzubia con la yema de los dedos a saque de esquina a los 51 minutos.

Lotina intentó rebajar la intensidad del juego con la entrada de Juan Carlos Valerón con la idea de tener más el balón en su poder, pero poco consiguió con el cambio porque el Sevilla mantuvo la iniciativa.

La tarea de los andaluces, sin embargo, resultó inútil porque el Deportivo volvió a apretar las líneas y cerró espacios al equipo de Jiménez, que pudo conseguir la igualada con un cabezazo de Escudé a centro de Navas que se marchó fuera.

El Sevilla no cesó en su lucha por rescatar el empate en el estadio de Riazor, pero el Deportivo se aferró al tanto de Juan Rodríguez y consiguió su cuarto triunfo consecutivo que le coloca en la lucha con los grandes.