La segunda parte pudo comenzar como la primera pero fue el Villarreal arreando por esos buenos minutos de juego quien conseguiría el 1-2, todo presagiaba que tras la lección de futbol ofrecida por el equipo levantino el marcador dificílmente se movería a favor del Sevilla; pero tal y como comentaba anteriormente el fútbol es un deporte en el que hay que mantenerse muy concentrado en cualquier lance, balón, jugada y así fue cuál león herido Jiménez movio banquillo para dar entrada a Adriano, soberbio, este jugador, que en cinco minutos revolucionó el partido junto al maliense Kanouté que también saldría posteriormente por Negredo; y así fue como el brasileño de Coritiba puso con la derecha en la cabeza de Ofabuloso el gol que éste pondría de cabezaso impresionante en la red del Villarreal, aquí el Sevilla se puso de nuevo el traje de faena para brillar como lo hacen los campeones muriéndose en casa jugada , en caso ocasión y así fue ncomo nuevamente Adriano otra más con la derecha puso el balón para que Kanouté pusiera el 3-2 en el marcador final.

El banquillo tiene la culpa , los dos cambios revolucionaron el partido, aquí no se duerme nadie y así lo certifican los que salen del sillón rojo, vaya si cambio la panorámica, síntoma inequívoco que tenemos un plantillón de los pocos que hay en España, seguimos la senda de los grandes y ya se ha cerrado el primer cuarto de liga.